El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) cumple
con éxito su rol de preservar la estabilidad monetaria del país en los últimos años. Sin embargo, con
las nuevas generaciones — milleimials y centennials—,
enfrenta nuevos retos para gestionar el talento joven,
que busca más participación, espacios de innovación
y predictibilidad en su estadía en el banco.
La estructura tradicional y jerarquizada del BCR
es una de las principales dificultades para retener al
talento joven, coinciden las fuentes consultadas. “las
personas que regresan [de maestrías en el exterior]
no tienen tanta libertad para asumir una posición
de liderazgo. Hay un orden muy vertical", comenta a esta revista un trabajador del BCR sin permiso
para declarar. “La jerarquía funcional existe, como
medio para garantizar la calidad y prevenir riesgos
operativos. No obstante, el trato entre colaboradores
es directo y horizontal", responde el BCR.
la implementación de espacios que permitan darle
mayor peso a las propuestas de los trabajadores más jóvenes sería clave.
“Puedes generar
estrategias de cambio de roles, asignación de proyectos, mejora de procesos.
No están teniendo un nuevo puesto,
ni ganando más, pero pasan a ser más
protagónicos", dice Sandra Céspedes,
profesora de Pacífico Business School
(PBS) de gestión de talento y desarrollo
organizacional. “A esta entidad entran
chicos con mucho potencial y con expectativas de trabajar con procesos de
última generación. Pierde atractivo si la rapidez
en la toma de decisiones
es muy burocrática”,
añade Angela Álvarez,
gerente sénior de consultoría de negocios de
PvvC Perú
Lea el artículo completo en la edición del 12 de julio de la revista Semana Económica (Lima, Perú).